Cuando una empresa fija los precios debe tener en cuenta a la vez los siguientes 3 factores:
- Los costes. Siempre hemos de calcular los costes del producto y añadirle lo que queremos ganar, y comprobar si existe demanda para ese precio. Si el precio sale elevado es que debemos reducir costes o bien el margen.
- Los consumidores. Tener en cuenta el precio que el consumidor piensa o cree que vale ese producto, ya que si lo fijamos por encima de lo que él cree que vale, se venderá poco, y si se fija por debajo, se venderá más barato de lo normal.
- La competencia. Si nuestro producto es parecido al de la competencia pondremos un precio similar (los cafés valen lo mismo). Pero si queremos captar nuevos clientes podemos reducir el precio, o si vemos que el cliente cree que nuestro producto es de mayor calidad que el de la competencia se podría valorar subir el precio.